2016
Antes de hablar del tema, debéis saber que existe una gran diferencia en cuanto a la respiración aeróbica y anaeróbica. Por esta razón, a diferencia de los ejercicios aeróbicos, los ejercicios anaeróbicos se realizan durante un período corto de tiempo, ya que no utilizan oxígeno para crear energía en el cuerpo.
En forma general, existen tres clases de ejercicios anaeróbicos. En primer lugar los isotónicos, los isométricos y ejercicios de calistenia. Los primeros permiten un rango bastante completo de movimiento de los músculos.
Por otra parte, en un ejercicio isométrico la posición del aparato de gimnasia es estacionaria, ejemplo de este tipo de ejercicios son las flexiones y abdominales en el que el propio peso corporal actúa como una fuerza de resistencia.
Son múltiples los beneficios que ofrecen los ejercicios anaeróbicos, en primer lugar, contribuye a la aceleración del metabolismo, eso mejora de forma significativa la salud, evitando problemas de indigestión, estreñimiento y debilidad.
Por otra parte, cuando se sigue una rutina fija de ejercicios anaeróbicos, eleva la densidad de masa ósea, lo que provoca fortalecimiento. Asimismo, se incrementa la vitalidad y la energía, mejorando la circulación de la sangre en el organismo y con la transmisión de sangre a todos los órganos.
Otro beneficio de los ejercicios anaeróbicos es el hecho de mejorar la personalidad en general, con la flexión de los músculos, se le está haciendo un favor al cuerpo e incrementando la seguridad y confianza en sí mismo. A medida que avanza el programa de entrenamiento, hay un cambio sustancial en la apariencia física por lo que la confianza se refleja en su cara.